Monday, September 30, 2019

700 días sin actividad para el cinturón absoluto de 185 lbs.


Este sábado durante UFC 243, cuando Robert Whittaker defienda el cinturón absoluto de las 185 lbs. contra el campeón interino Israel Adesanya, habrán pasado exactamente 700 días desde la última vez que se disputó dicho título.

¿Cómo ha sucedido esto? ¿Cómo se llegó a este número de proporciones bíblicas? Recapitulemos:


Bisping vs. GSP: La última vez que el título se disputó

 

El título fue disputado por última vez el 4 de noviembre de 2017 en UFC 217, cuando el campeón absoluto Michael Bisping defendía su cinturón contra el histórico excampeón de 170 lbs., Georges St. Pierre, quien retornaba después de casi cuatro años de inactividad dentro del octágono. Anteriormente, en UFC 213, Robert Whittaker había conseguido una reñida victoria por decisión unánime contra el cubano Yoel Romero, y estaba a la espera del resultado de la pelea entre Bisping y GSP.

En contra de los pronósticos de muchos (incluido del mismo Bisping), Georges St. Pierre conseguiría conquistar el título absoluto de los pesos medianos al someter al Bisping en el 3er asalto. Todo quedaba listo, para que Robert Whittaker unificara el título contra Georges St. Pierre.



Sin embargo, Georges St. Pierre renunció al título de peso mediano apenas 33 días después de haberlo ganado. Robert Whittaker fue promovido inmediatamente a campeón absoluto, pero sin haber nunca disputado el título.


Whittaker vs. Rockhold: reconstruyendo la división

 

El reinado de Michael Bisping como campeón de los pesos medianos, dejó a la división en mal estado. La organización de ambas de sus dos defensas de su título (contra Dan Henderson y Georges St. Pierre respectivamente) obedecieron a intereses externos y prácticamente sin considerar los rankings de la división. Bisping estaba peleando por revancha contra un Dan Henderson en retirada y por publicidad contra un retornante GSP, mientras los contendientes como Robert Whittaker, Yoel Romero, Luke Rockhold y David Branch (entre otros) peleaban entre ellos esperando que pasaran estas defensas y expectantes por la oportunidad de poder disputar el título

Una vez que GSP renunció al título y Whittaker fue promovido, UFC se apresuró rápidamente a organizar la primera defensa de Whittaker y eligieron al excampeón Luke Rockhold, quien había sido el peleador contra quien Michael Bisping ganó el título y que después de eso consiguió una importante victoria contra el excampeón de dos divisiones de WSOF, David Branch.

La pelea entre Whittaker y Rockhold fue programada para UFC 221, pero el fantasma de las lesiones atacó y Whittaker se retiró de la pelea, fue reemplazado por Yoel Romero y se cambió el evento estelar por una pelea de título interino entre Romero y Rockhold.

Sin embargo, el día antes del evento atacó el fantasma del problema en el corte de peso, y Yoel Romero no dio el peso, de modo que la pelea por el título interino se realizó pero siendo Rockhold el único elegible para ganarlo. Al final la pelea la ganaría Romero por KO en el 3er asalto, dejándolo en una extraña posición de cuestionable contendiente #1 al título.


Whittaker vs. Romero II: arriesgando nada y a la vez todo

 

Con la victoria de Romero sobre Rockhold, y sin haber otros claros contendientes a la vista, UFC organizó la revancha entre Robert Whittaker y Yoel Romero por el título absoluto de las 185 lbs. para UFC 225

Sin embargo, otra vez atacó el fantasma de Romero de problemas en el corte de peso, quien no dio el peso para poder disputar el cinturón. De modo que la pelea fue cambiada a pelea de título, por un evento estelar de cinco asaltos sin título de por medio.

Esta era una situación extraña y riesgosa, porque si bien es cierto Robert Whittaker no arriesgaba su cinturón, pero sí arriesgaba su credibilidad y su legitimidad como el mejor de las 185 lbs. Si Robert Whittaker ganaba, pues no había problema, después de todo él era el campeón. Pero ¿y si ganaba Romero? significaría que Whittaker seguiría siendo el campeón pero habiendo perdido contra Romero, y eso habría significado organizar tarde o temprano una tercera pelea entre Whittaker y Romero para definir quien era verdaderamente el mejor, pero teniendo la agravante de que Yoel Romero había fallado dos veces en dar el peso y que ese hecho en sí mismo ya le quitaba mérito para volver a pelear por un título absoluto. Este fue sin duda, el momento más tenso para la división en estos 700 días en que el título no se disputó.

Al final, Robert Whittaker ganaría la difícil pelea con una agónica decisión dividida, dando así un respiro tanto a aficionads como a organizadores de UFC, pudiendo así olvidarse de Romero y mandarlo de vuelta al final de la fila de los contendientes.


Whittaker vs. Gastelum y el TUF


En la labor de continuar reconstruyendo la división de 185 lbs., UFC organizó la temporada final de The Ultimate Fighter con peleadores masculinos pesos pesados y pesos plumas femeninas, y los entrenadores serían Robert Whittaker y Kelvin Gastelum.

Después de fallar varias veces en la báscula intentando pelear en las 170 lbs., Kelvin Gastelum decide quedarse en las 185 lbs., donde originalmente ganó su debut de UFC en la final del TUF temporada 17 (Team Jones vs. Team Sonnen) contra el (en aquel entonces) prometedor Uriah Hall. Kelvin Gastelum se veía en peso mediano como un pequeño Mike Tyson, teniendo victorias por KO/TKO contra peleadores como Nate Marquardt, Tim Kennedy, Vitor Belfort (aunque ésta posteriormente fue declarada como No-Contest porque Gastelum dio positivo para Marihuana) y Michael Bisping justo después de que Bisping perdiera el título contra GSP. Además, Gastelum consiguió una importante victoria por decisión dividida cotra Ronaldo Jacaré Souza. Con esos logros, Gastelum fue un peleador que rápidamente destacó en esta categoría de 185 lbs. que estaba reconstruyéndose.

Whittaker y Gastelum estaban programados para pelear en UFC 236 por el título absoluto de las 185 lbs. Sin embargo, nuevamente atacaría el fantasma de las lesiones y Whittaker se tendría que retirar de la pelea contra Gastelum. El lugar de Robert Whittaker fue tomado por Israel Adesanya, quien disputaría contra Kelvin Gastelum un título interino.

Israel Adesanya, apodado "The Last Stylebender", fue otro peleador que rápidamente destacó en esta división de 185 lbs. que se estaba reconstruyendo. Excampeón de kickboxing que hizo un cambio hacia las MMA, que llegaba a UFC on un récord invicto, que rápidamente comenzó a conseguir buenas victorias y un par de buenas finalizaciones, con un estilo vistoso de pelea y personalidad llamativa; rápidamente ascendió en los rankings, siendo una victoria por decisión unánime contra la leyenda Anderson Silva la que lo catapultó a pelear por el título interino contra Kelvin Gastelum.

La pelea entre Gastelum y Adesanya se llevó a cabo en UFC 236, ganando Israel Adesanya con una contundente decisión unánime y reclamando el título interino de las 185 lbs.


Whittaker vs. Adesanya: finalmente disputando el título absoluto... esperemos


En estos 700 días, se hicieron tres intentos de organizar una pelea por el título absoluto de las 185 lbs., y faltando cinco días esperamos que finalmente se lleve a cabo este 5 de octubre en UFC 243 entre el campeón interino Israel Adesanya y el campeón absoluto Robert Whittaker.

Con esta pelea, esperamos que nuevamente se regularice la situación en la división de 185 lbs., que ya en este momento la categoría finalmente ha logrado reconstruirse un poco, habiendo surgido nuevos contendientes como el mismo Israel Adesanya, como Paulo Costa (quien derrotó a Yoel Romero en su última pelea) o como Jack Hermansson y Jared Cannonier quienes recién estelarizaron el último evento UFC Fight Night antes de UFC 243.




¿Qué crees que suceda en el futuro de los pesos medianos de UFC? Déjanos abajo tu opinión, y si quieres ver más análisis como estos no olvides seguirnos en Facebook y Twitter

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